Otro microrrelato más del mismo libro. Léase con humor y mente despejada. Los protagonistas de los relatos pueden opinar lo que ellos y ellas quieran. Sus opiniones y palabras no son necesariamente las del autor.
LAS VACACIONES DEL CONDE
Observé
su cuello, sus hombros desnudos, sus brazos largos, su carne sonrosada. No lo
pude resistir, era más fuerte que mi voluntad. Intenté probar el sabor de su
sangre pero la muy puta había comido pollo al ajillo y, de primero, gazpacho.
Qué horror. Tuve que ir a una farmacia a por un enjuague bucal para limpiar a
fondo mis preciosos colmillos. Maldigo el día en que se me ocurrió la funesta
idea de pasar mis vacaciones en Sevilla.
Qué horror. Tuve que ir a una farmacia a por un enjuague bucal para limpiar a fondo mis preciosos colmillos. Maldigo el día en que se me ocurrió la funesta idea de pasar mis vacaciones en Sevilla. descubre más acerca de Sevilla.
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